Otra para el soundtrack de la nostalgia.
En el marco del festival itinerante de cine documental Ambulante 2011*, llega a México éste trabajo de 2010 elaborado por Will Lovelace y Dylan Southern. La línea es bastante obvia: el recuento tras bambalinas de la historia que vivió y marcó la banda de britpop oriunda de Colchester, Inglaterra: Blur.
Son 102 minutos compuestos por fragmentos de presentaciones, fotos, relatos del pasado y del presente que se van entretejiendo a lo largo del documental para al final, cerrar con un conmovedor nudo: la (ahora) legendaria presentación en el festival de Glastonbury de 2009.
No dispongo de conocimiento suficiente para el análisis de un documental, pero creo que además de su valor estético, Blur: No Distance Left to Run tiene varios puntos que lo hacen interesante para fans y no fans:
1. Alterna información del presente y del pasado (inicios de los noventa). Lo que convenientemente delimita el tiempo-espacio que tanto el director, como el grupo desean mostrar, lo que ayuda al espectador a no perderse entre tanta información.
2. No profundiza demasiado en datos “de fans”. Simplemente recuenta hechos y testimonios de los protagonistas de Blur.
3. Hay un balance entre entrevistas, presentaciones, fotografías y todas las fuentes de información consultadas y expuestas para hablar de la banda, resultando en un documental bastante dinámico.
Son 102 minutos compuestos por fragmentos de presentaciones, fotos, relatos del pasado y del presente que se van entretejiendo a lo largo del documental para al final, cerrar con un conmovedor nudo: la (ahora) legendaria presentación en el festival de Glastonbury de 2009.
No dispongo de conocimiento suficiente para el análisis de un documental, pero creo que además de su valor estético, Blur: No Distance Left to Run tiene varios puntos que lo hacen interesante para fans y no fans:
1. Alterna información del presente y del pasado (inicios de los noventa). Lo que convenientemente delimita el tiempo-espacio que tanto el director, como el grupo desean mostrar, lo que ayuda al espectador a no perderse entre tanta información.
2. No profundiza demasiado en datos “de fans”. Simplemente recuenta hechos y testimonios de los protagonistas de Blur.
3. Hay un balance entre entrevistas, presentaciones, fotografías y todas las fuentes de información consultadas y expuestas para hablar de la banda, resultando en un documental bastante dinámico.
Ahora que, como fan, puedo decir (de la manera más subjetiva que hay) que me encantó este trabajo. Tantas canciones, tantos recuerdos. Al ver Blur: No Distance Left to Run recordé que los músicos también son humanos, y que de la misma manera en que ellos con su música y letras sonorizan y transforman nuestras vidas, los fans y todo el “mundo” a su alrededor también lo hacen.
Conmovedora selección de tracks e imágenes que a quienes crecimos con Blur nos pone la piel de gallina y amenaza con derivar en momento Remi.
Lamentablemente ya no está en cartelera acá en el D.F., pero si tienen otra forma de conseguir y/o ver este documental, no duden en hacerlo.
Conmovedora selección de tracks e imágenes que a quienes crecimos con Blur nos pone la piel de gallina y amenaza con derivar en momento Remi.
Lamentablemente ya no está en cartelera acá en el D.F., pero si tienen otra forma de conseguir y/o ver este documental, no duden en hacerlo.
* Cartelera Ambulante de la A-Z: http://www.ambulante.com.mx/peliculas_az.php